sábado, 2 de mayo de 2009
dentro de una monótona existencia, y una tempesatad de situaciones, la memoria, ha recobrado su dominio para que, en cierta mediada, tenga yo conciencia de mi estado. siento que no me despierto de un sueño ordinario. recuerdo que soy propenso(a) a la catalepsia. Finalmente, como por el oleaje de un oceano, mi espiritu estremecido es arrollado por el horrendo espectro de la idea.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario